Todos nos presentamos ante el mundo con una actitud que nos define. Está bien que sea así porque esta es la forma en la que las personas nos identificamos, unos con otros, y creamos colectivos sociales en el cual nos reconocemos por cualidades comunes de cada integrante y que se manifiestan aun cuando provengan de diferentes contextos.
Este acto sucede casi inconscientemente desde la infancia, digo “casi” porque es cuando de pequeños comenzamos a familiarizarnos con ciertos comportamientos de nuestros familiares o tutores, y también comparamos con los comportamientos de amigos u otras personas con las que nos vinculamos esporádicamente.
A medida que crecemos, el acto casi inconsciente pasa a ser consciente. Tener una personalidad nos representa, nos identifica, nos posiciona frente a otros marcando las diferencias. Sin embargo, este diferenciamiento se hace mediante estereotipos. ¡Vaya paradoja!
Con las empresas, pymes y emprendedores sucede lo mismo. Las conductas de cada una de ellas será diferente, aún cuando responda a estereotipos similares. El planteo, en este caso, no es “casi” inconsciente sino consciente al 100% porque dependerá de qué decisiones se toman en cuanto a la personalidad de una marca para comprender cuáles serán sus valores, su visión y misión.
Pero más allá de eso, tener una personalidad definida será de gran ayuda para construir cualquier tipo de estrategia de comunicación con objetivos claros y concretos.
Uno de los discípulos de Sigmund Freud, el psicoanalista Carl Jung aseguraba que:
“Los arquetipos representan el inconsciente colectivo que compartimos todos los seres humanos independientemente de nuestra cultura, de nuestro sexo biológico o del periodo de la historia en que hayamos vivido.”
Carl Jung
Existen muchas representaciones de arquetipos de personalidad, el más popular es el modelo de Margaret Mark y Carol Pearson, creadoras del libro The hero and the outlaw, en donde plasmaron 12 arquetipos que son los más usados para definir la personalidad de las marcas más conocidas en el mercado, como también las nuevas.
Como veremos en adelante, cada arquetipo de personalidad de marca definirá una identidad por el cual es posible construir un lema en base a un conjunto de características, entre ellas, aquellas que definen los valores de la marca, como así también sus temores, anhelos, fortalezas, debilidades, etc.
Fuente gráfica: Woman Blog – Asistup.com/blog
A lo largo de los años, cada estereotipo fue reuniendo muchas connotaciones que profundizaron aún más su alcance en cuanto a cómo definir una marca. Es así como se generó un universo en torno a estos estereotipos:
Fuente gráfica: Reynaldo Marquez – https://reynaldomarquez.com/blog
A tal punto, que las marcas emergentes, rastreaban el arquetipo de una u otra marca con la que se sentían emparentados y con la cual podrían trazar la visión corporativa. Sí, eso mismo: los colectivos sociales en donde todos, más tarde o más temprano, subimos para hacer el mismo viaje por esta existencia.
Las ventajas de definir la personalidad de una marca son infinitas, empezando por:
- Nos permite elegir un tono y voz de marca.
- Gracias a esa definición, es posible encuadrar cualquier tipo de comunicación desde ese tono y vos, sea para venta, para dar respuesta, para sortear objeciones o para representar a la marca ante un contenido polémico.
- Permite bajar a un manual de estilo el comportamiento verbal para que se genere una cultura corporativa en torno a esas definiciones.
- Es de gran ayuda para estereotipar otros procesos de una empresa, por ejemplo, crear Manuales de procesos, documentos muy útiles para empresas dedicadas a la construcción, diseño, fabricación o desarrollo de productos.
- Unifica la oralidad de una compañía bajando un discurso lineal para todas las áreas y cargos. Así es como un empleado de Microsoft se siente identificado con lo que dice Satya Nadella, por ejemplo.
- Acelera los procesos y toma de decisiones, gracias a que las grandes corporaciones pueden darle independencia en el comportamiento de cada área.
Estos son algunos de los beneficios, sin dudas hay muchos más. Sólo los vas a descubrir cuando los pongas en acción con tu propia marca.
